Aunque una depresión severa puede destruir la vida de la persona enferma y la de su familia, si no recibe un tratamiento eficaz, en la mayoría de los casos se puede acabar con el sufrimiento. La depresión es una enfermedad que afecta al cerebro, la manera de pensar y el estado de ánimo, cambiando en muchos aspectos la vida cotidiana de la persona. No debemos confundir la tristeza, que es un estado de ánimo pasajero, con la depresión, que puede durar desde semanas hasta años.
La depresión severa provoca que actividades que antes eran sumamente placenteras ya no lo sean. No todos los enfermos padecen el mismo número de síntomas:
-Insomnio o por el contrario dormir más de lo normal.
-Pensamientos de suicidio o muerte, con intento de suicidio en algunos casos.
-Irritabilidad e inquietud.
-Tristeza, ansiedad o sensación de vacío.
-Pesimismo y desesperación. Lee el resto de esta entrada »